El real supera los
6 millones, el paro registrado supera por primera vez los cinco millones. Ya ha
perdido sentido hablar de un nuevo récord de paro. Cada mes que pasa la cifra
empeora la anterior. Así llevamos cinco años. Por desgracia, casi ha dejado de
ser noticia. Pero hay que recordar el drama y la tragedia que supone para
España que por primera vez en la historia el paro registrado (el número de
inscritos en las oficinas de empleo) haya superado los cinco millones. En
concreto, son ya 5.040.222 los desempleados apuntados al paro como
coloquialmente se dice después de que el pasado mes de febrero 59.444 personas
perdieran su empleo. El pasado mes el paro creció 1,19% con respecto a enero.
Según los datos de Empleo, el paro subió en febrero en ambos sexos, pero algo
más entre los hombres, con 30.796 desempleados más (+1,2%), frente a un repunte
del paro femenino de 28.648 mujeres (+1,1%), situándose el total de mujeres en
paro en 2.536.596 y el de varones, en 2.503.626. Por sectores, el paro aumentó
en febrero en todos ellos. En los servicios se registraron 39.788 desempleados
más (+1,3%); en el colectivo sin empleo anterior hubo 8.711 nuevos parados
(+2,4%); la agricultura sumó 7.987 desempleados (+3,9%); la industria añadió
1.581 parados a sus listas (+0,29%), y la construcción experimentó un
crecimiento de 1.377 parados (+0,18%). En cuanto a la contratación, en febrero
se registraron en el antiguo Inem un total de 949.844 contratos, un 4% menos
que en febrero de 2012. De ellos, 91.584 eran indefinidos, cifra equivalente al
9,6% del total y un 5% inferior a la del mismo mes de 2012.
Reparar los daños
causados por los abusos de la banca, además de los sufrimientos causados a
cientos de miles de personas, supondrá una carga difícilmente soportable para
los contribuyentes durante mucho tiempo. Unos costes que obligan y obligarán a
recortar más aún muchos servicios básicos. Los fondos comprometidos para salvar
a los bancos y cajas españoles ascienden ya a 185.518 millones de euros -18,5%
del Producto Interior Bruto (PIB). La mayor parte de las ayudas actuales
corresponden a avales otorgados por el Tesoro, que ascienden a 117.497 millones
de euros. Las inyecciones de capital superan los 60.000 millones, 6% del PIB,
que han sido aportados en su mayor parte por el Mecanismo Europeo de
Estabilidad (MEDE) -41.025 millones- y el resto por el Fondo de
Reestructuración Bancaria Ordenada (FROB), (12.975 millones) y el Fondo de
Garantía de Depósitos (FGD) -6.202 millones-. De hecho el FROB ya da por
perdida la práctica totalidad de los fondos destinados a capitalizar las
entidades más deterioradas que superan los 14.500 millones, incluyendo los
préstamos.
Como se ve la
crisis bancaria va unida de la mano al aumento del paro en el Estado Español,
las cifras del paro oficial por encima de cinco millones nos devuelven al punto
de partida: a volver a hablar de igualdad, de lo necesario de la igualdad para
poder encontrar sentido a continuar hablando, a continuar pensando “diferente”.
El pensamiento único, ¿ayuda a la igualdad? De momento no hace más que agrandar
las desigualdades diciendo que protege las diferencias. La básica
heterogeneidad de los seres humanos y la multiplicidad de variables desde la
que se puede juzgar la igualdad, ayudan a los cínicos a hacer depender la
libertad de la preservación de las diferencias, por ejemplo, hay más libertad
de hacer lo que quieres si hay más gente en la cárcel o hay menos obligación de
trabajar si hay más gente en paro. la legitimación del Estado se piensa como
función de su capacidad para promover el bienestar en la sociedad, concebida
como objeto de administración benéfica, en el segundo se la quiere hacer
descansar en la forma como están estructuradas las relaciones entre los
ciudadanos como co-sujetos del orden político. La libertad de decidir no sólo
no se da a los catalanes, es más, lo que todos entendemos por pensamiento único
no es nuestra común indignación sino la ideología dominante, la ideología de la
clase dominante. Ellos deciden.
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